El DCU es un tipo de diseño que hace referencia a que, si un producto está destinado a cubrir unas necesidades concretas de sus usuarios, lo mejor es centrar todo el desarrollo en ellos. Este tipo de diseño utiliza métodos y técnicas cuyo proceso está dirigido por información sobre las personas que harán uso del producto.
Por otro lado, el Design Thinking es una metodología del DCU que está basada inicialmente en satisfacer a los usuarios a través de la innovación y se compone de seis fases que se relacionan entre sí en ambos sentidos.
Una primera fase sería la de “Empatizar” con los usuarios para comprender su entorno y necesidades.
La segunda fase hace referencia a “Definir”, ya que una vez conocemos las necesidades de los usuarios, se definen los problemas, limitaciones y los desafíos que se les presentan y que por consiguiente se tienen que resolver haciendo uso de un cuadro innovador.
En una ternera etapa, tenemos como herramienta de ayuda, el “Brainstorming” o “tormenta de ideas” para conseguir el número máximo posible de ideas y opiniones que pueden provenir de cualquier persona/integrante de un equipo multidisciplinar.
En la cuarta fase, se comienza a “Prototipar” a partir de las ideas ganadoras de la fase anterior. En algunos casos, en esta etapa se pueden encontrar necesidades no definidas y se tendría que retroceder a la fase anterior o incluso empezar de nuevo.
Una vez finalizada la etapa de prototipado, tendríamos ya la quinta etapa: Testeo. En ésta se Testea el producto creado. Es entonces donde los usuarios finales prueban el producto y si las conclusiones son positivas, se pasa a la última fase, que es implementarlo en el sistema.